La actividad más gratificante: estar aquí y ahora

“De buena gana toma los regalos de la hora presente y deja de lado los pensamientos molestos”

Séneca

watch-698498_1280

Estoy convencido de que saber estar en el aquí y el ahora puede hacer la vida mucho más disfrutable y rica. Cuando me mantengo en el presente descubro medios y modos por los cuales puedo crecer y desarrollar mi potencial y arreglar las dificultades en mi vida. Si quiero descubrir lo que necesito, lo que es importante para mí, hacia dónde quiero ir, es esencial que tome contacto con el momento presente, que vuelva constantemente a la experiencia directa, a las sensaciones del momento. Ahora mismo, mientras veo estas líneas, reviso mi cuerpo, ¿lo estoy tensando? Noto mi respiración, ¿es corta y agitada o lenta y profunda?

Pongo atención a aquello que está en mi campo visual. Mi interés oscila entre lo que hay fuera y dentro de mí: en mi mente y cuerpo. Atiendo a las formas en que me alejo de mi experiencia inmediata, a la manera en que evado un sentimiento, pensamiento o alguna acción. Al hacerlo, logro darme cuenta de una incomodidad, de alguna idea o de una acción que me aleja del presente. Todo eso ocurre aquí y ahora.

“El pasado existe ahora como recuerdo, lamento, tensión corporal. El futuro no existe ahora excepto como fantasías, esperanzas”, en palabras de Gary Yonteff.

Es auténtico sólo lo que experimento en este momento, a nivel sensorial y en mis pensamientos, con respecto al pasado, presente o futuro. La tensión que siento en mi estómago en este momento es verdadera; el miedo que percibo en anticipación a una futura entrevista de trabajo es real; la forma en que me relaciono con la persona que está frente a mí en este momento es lo que es. Al centrarme en el presente me responsabilizo de mis pensamientos, sentimientos y acciones, y los experimento en toda su plenitud.

Me concentro en lo tangible, lo obvio, lo perceptible. Es aquí y ahora que decido hacer un cambio con respecto a mi actuar, pensar o sentir. Aprender a estar en el presente es mi objetivo: aprender una nueva forma de “estar en el mundo”.

Al centrarme en cada momento que vivo, me permito estar abierto a cualquier vivencia, aceptarla en lugar de ponerme a la defensiva ante las posibilidades que se me presentan.

Cuando me rindo ante el presente, acepto que las cosas, en este momento, son de la única manera en que pueden ser.

Cuando acepto mi experiencia presente no necesito emitir juicios: todo está bien, nada es bueno ni malo, simplemente es. Dejo que las cosas sucedan, estoy dispuesto a aceptar, no trato de controlar, no necesito empujar el río, porque fluye por sí mismo.football-478321_1280

Al vivir conscientemente en el presente, me mantengo tranquilo con relación al futuro, ya que el día de mañana habrá tiempo para preocuparse; no actúo con base en fantasías catastróficas y confío plenamente en que el mundo es un lugar bueno, en que la vida, el universo me dará lo que necesito. Cuando me rindo ante el presente, retorno a mi inocencia y recupero mi confianza básica en la vida. Y no sólo eso, también me entrego a la actividad más gratificante que hay: vivir.♦

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s